Nueva prórroga para CFDI de nómina 4.0

A partir de este mes, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha informado, conforme a la 9a. Resolución de Modificaciones a la Miscelánea Fiscal 2022, que el nuevo Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI) de nómina versión 4.0 será obligatorio a partir del 1.o de abril del 2023.

La ampliación del plazo es aplicable para quienes realicen pagos de salarios y, en general, por la prestación de un servicio personal subordinado, de acuerdo con la Ley del Impuesto Sobre la Renta (LISR) y que están obligados a emitir un CFDI por los mismos.

La prórroga la ofrece la autoridad fiscal ante los problemas que hubo de las largas filas de trabajadores en las oficinas del SAT para conseguir su constancia de situación fiscal.

Y es que, derivado de la reforma fiscal para 2022 se incluyeron como datos obligatorios para el receptor del CFDI los siguientes campos: RFC, nombre, razón o denominación social, código postal del domicilio fiscal y el uso.

Los contribuyentes a quienes aplica cuentan nuevamente con un periodo de convivencia con la versión 3.3., anteriormente publicado el 8 de junio de 2022, que tenía como plazo para la entrada en vigor obligatoria de la versión 4.0 al 1.o de enero de 2023.

Por el momento, no se anunció postergación para la emisión de facturas en los negocios; entonces, cualquier compra o consulta médica a partir del 1 de enero de 2023 deberá facturarse con la nueva versión.

Los patrones deben gestionar su información actualizada y validada ante el SAT para cumplir en tiempo y forma con esta versión en los CFDI de nómina y así evitar comprometer la deducibilidad de esta.

Con información de El Financiero y KPMG

¿Para qué más se está solicitando la constancia de situación fiscal?

Informó el Servicio de Administración Tributaria (SAT) que, durante el primer semestre del presente año, atendió a casi 21 millones trámites de contribuyentes de forma presencial y a través de la plataforma SAT ID, cifra que esta cerca de triplicar 7 millones de atenciones en el mismo periodo del anterior año.

Estas cifras representan un aumento de 193.5 por ciento respecto a 2021, e incluso 152.9 por ciento frente a 2019, antes de la emergencia sanitaria por COVID-19. La mayor demanda fue para obtener la Constancia de Situación Fiscal; dicho documento fue solicitado por empresas para poder cumplir con los nuevos requisitos de la versión 4.0 de la factura electrónica y para el llenado de los recibos de nómina.

Además de ello, la constancia fiscal la están solicitando también entre quienes realizan un trámite educativo para obtener algún certificado o título.

Al respecto, hay dos puntos muy importantes que destacar. Uno; puede tramitarse la contraseña por la plataforma del SAT ID en donde, con esta contraseña, van a poder bajar esa constancia las veces que lo necesite el contribuyente en la página del SAT. Dos; pueden acudir a las oficinas del SAT con su identificación y su RFC en donde el SAT les dará impresa la constancia de situación fiscal, la cual les servirá para cualquier trámite.

Así pues, conforme van aumentando los trámites y procedimientos en que la constancia de situación fiscal es solicitada, no es un asunto olvidado que pueda quedar fuera de las obligaciones que tenemos como contribuyentes.

Con información de Meridiano y El Contribuyente