Uso del fisco de la IA contra evasión fiscal
A diferencia del año pasado, cuando la fiscalización se centró en la instrumentación de las tasas efectivas del Impuesto sobre la Renta (ISR), este año el Servicio de Administración Tributaria (SAT) se apoyará en la inteligencia artificial (IA) para evitar la evasión fiscal en sus distintas formas.
En 2023, el fisco logró recuperar 502 mil 540 millones de pesos por actos de fiscalización, 12.8% más respecto a los 422 mil millones que obtuvo por la misma vía en 2022.
Así, la IA servirá para seguir recuperando lo que adeudan los contribuyentes, monto que al cierre de 2023 se ubicó en 2.3 billones de pesos, de los cuales 1.9 billones corresponden a empresas.
Esta tecnología estará presente en todo el universo tributario, en donde ningún contribuyente o empresa podrá esconderse de los modelos de analítica y la aplicación del machine learning (aprendizaje automático).
No obstante, especialistas señalan que, si bien la IA llegó para quedarse como una tendencia mundial menos costosa, el fisco se centrará en las grandes compañías y multinacionales.
Al parecer, será voluntad política también utilizarla para quienes operan en la economía informal, porque a mayor sofisticación del SAT, se aislarán y buscarán mantenerse en un bajo perfil.
En tanto, para las pequeñas y medianas empresas el reto será mayor, pues muchas desconocen que el fisco emprenderá una mayor fiscalización vía digital.
Al tener tanta información a través de más de 80 mil millones de facturas electrónicas —28 millones generadas diariamente—, además de la Carta Porte y el complemento de nómina, el SAT tiene todo para generar perfiles ordenados de empresas y personas físicas para analizarlos.
Con ello, podrá detectar de manera rápida y oportuna riesgos en operaciones inusuales de compraventa de los causantes.
Por otra parte, con la IA el SAT podría agilizar su fiscalización para detectar a quienes no cumplen. Hay potencial para interpretar, analizar y compulsar la información para detectar el mal comportamiento de contribuyentes, y evitar la evasión y prácticas fiscales indebidas en perjuicio del fisco.
El nivel de evasión fiscal en el país se refleja en el tamaño de la economía informal, que de acuerdo con el Inegi es de casi 60% de toda la actividad productiva, y se trata de quienes no hacen ninguna contribución.
De acuerdo con el Plan Maestro 2024 del SAT, se hará uso de la inteligencia artificial para una mejor planeación en los procesos de recaudación. Además, se pondrá énfasis en el lavado de dinero en actividades vulnerables y la simulación de pensiones, para identificar improcedencias de saldos a favor del IVA, el robo de combustibles y para detectar a empresas factureras. También, para verificar el pago en tiempo y forma de impuestos en el comercio exterior y los gravámenes internos.
Según su nivel de riesgo, con la IA se podrán identificar redes complejas de elusión y evasión, así como inconsistencias en los comprobantes fiscales digitales por internet (CFDI), asociadas con el contrabando y empresas fachada.
El indicador del Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT) subraya que las administraciones tributarias han comprendido y han comenzado a capitalizar el gran potencial que poseen las innovaciones tecnológicas más avanzadas, como la analítica de datos o la IA, para fortalecer sus capacidades operativas.
Esto incluye la posibilidad de avanzar en la automatización de procesos, así como en el procesamiento eficaz de un creciente caudal de información estadística que fluye hacia estas agencias, contribuyendo a una mejor gestión de los riesgos tributarios.
Con información de El Universal
