Errores a evitar al planear la pensión

Si estás cerca de obtener tu pensión y ya estás investigando lo que necesitas para lograrlo, lo ideal es que cuentes con margen de tiempo suficiente para corregir algunos posibles errores, o mejor, no cometerlos y afectar tu pensión del IMSS.

Los malos pasos en términos de pensiones los damos, a veces, por desconocimiento. Uno de estos aspectos es el sueldo con el que estás registrado ante el Instituto Mexicano del Seguro Social.

Debes saber que, si perteneces a la Ley de 1973 o régimen 73, las últimas 250 semanas laboradas son claves. Esto tiene que ver, precisamente, porque es ese periodo de tiempo el que se toma en cuenta para sacar un promedio salarial de la vida del trabajador. Y un grave error sería cotizar en ese espacio de tiempo con salario mínimo.

Para determinar una pensión del IMSS bajo la Ley 73, hay tres pilares básicos: el número de semanas cotizadas, el promedio salarial del trabajador en sus últimos cinco años y la edad en que decida jubilarse.

El promedio salarial no es cosa menor, pues su influencia puede ser de hasta el 50 por ciento de la pensión. Por ejemplo, si de los últimos cinco años, se trabajó durante dos con sueldo de $450 diarios, pero tres más con mínimos, esos tres años bajarán el promedio de los años buenos. 

Entonces, es clave que el salario base de cotización en el cual estar registrado ante el IMSS sea bueno. Sin embargo, debes saber también lo siguiente: elementos como las semanas cotizadas pueden jugar a tu favor.

Por ejemplo, hay personas que, por sus propias circunstancias, sólo pudieron tener un empleo con salarios mínimos en esos periodos. Sin embargo, si tienen una elevada cantidad de semanas cotizadas, como de 1500 en adelante (idealmente), podrían tener una mejor expectativa.

Y esta se da por medio de la modalidad 40. Este esquema permite seguir afiliado al IMSS de manera voluntaria, sin patrón, y es el propio trabajador el que contrata el salario que desea cotizar.

En algunos casos, dos años topados – aunque tenga tres con sueldos bajos – de sus últimos cinco años, podrían impactar su pensión favorablemente. Aunque, en la mayoría de situaciones se requieren salarios topados en modalidad 40 por esos periodos.

Cada caso es particular, pues puede haber perfiles de trabajadores que no encajen en el esquema antes explicado. Por eso, lo ideal es un análisis personalizado.

Algunas personas con salarios mínimos de toda su vida y menos de mil semanas, pueden mejorar su pensión, pero deben hacer altas inversiones y valorar el costo – beneficio de ese esfuerzo financiero. 

Por tanto; si bien los salarios bajos pudiesen afectar el promedio de pensión, algo que ayudaría, además de la inversión alta en modalidad 40, es trabajar hasta los 65 años para obtener la pensión por Vejez, que equivale al 100 por ciento del monto determinado por el IMSS. 

Enfatizando: si eres afiliado al IMSS en la Ley de 1973 y en tus posibilidades está tener mejores salarios, muy por encima del mínimo en tus últimas 250 semanas laborales, busca ese camino, pues te dará mejores opciones al momento de tramitar una pensión del IMSS.

Con información de Debate